Los 18 años son el principio de una gran aventura. Colabora en hacer los sueños realidad de algún joven. Apadrina. Jorge Sanz. Actor
El 24 de marzo de 2014 se cumplirán 90 años que la Fundación Nazaret acoge y educa niños y jóvenes en la finca de s’Hort del barrio de El Terreno de Palma. Desde entonces han pasado por ella miles de niños y niñas que, por diferentes motivos, no pueden estar con sus familias.
En muchas ocasiones no somos conscientes de que los grandes problemas de nuestra sociedad (violencia de género, drogadicción, prostitución...) afectan a los más vulnerables, los niños y jóvenes. La Fundación Nazaret tiene la misión de ayudar a estas personas en su educación y en su formación personal.
Los más pequeños viven juntos en un piso de la sede de la Fundación y tienen servicios como cocina o limpieza. Los niños pueden concentrarse en sus estudios y en jugar, que también es una parte importante de su educación.
Los mayores ya viven en otro piso del edificio y se les enseña a ser autosuficientes. Deben limpiar sus espacios, cocinar y organizarse entre ellos. El objetivo es que alcancen una responsabilidad y aprendan la realidad que se encontrarán cuando tengan que abandonar Natzaret al llegar a la mayoría de edad.
El objetivo de los apadrinamientos es que los jóvenes de la Fundación Natzaret tengan las mismas oportunidades que el resto de jóvenes. A los 18 años es cuando tienen más dudas sobre su vida y en muchos casos no tienen un adulto que los acompañe en la aventura de su emancipación.
Los apadrinamientos pueden ayudar a los jóvenes a tener una financiación para
sus ilusiones y/o una persona de referencia. Esto es lo que puedes aportar:
Para hacer realidad proyectos concretos: Sacarse el carnet de conducir, estudiar un curso, ir a la universidad... Toda aportación que podamos hacer les ayudará a hacer realidad sus sueños.
Se puede colaborar de dos maneras:
Financiando un proyecto concreto del joven como el caso mencionado de la matrícula de un curso.
Aportando una cantidad periódica que ayude al financiar sus proyectos.
Los jóvenes tienen dudas en muchos temas en una edad en la que deben tomar decisiones importantes. En muchas ocasiones, no tienen una presencia familiar que los oriente y aconseje.
Necesitan un referente, puedes ser tú.
Una persona cercana con quien ir a comer o a tomar un café y hablar del futuro, de las ideas que tienen o los temas que les inquietan. Ayúdales a sentirse reconocidos y respetados.